Eso no estaba en mi libro de Historia del ajedrez
Editorial EDITORIAL ALMUZARA
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Esta es la historia jamás contada del juego de estrategia más practicado en el mundo así como de algunos de los hijos predilectos de Caissa, la diosa del ajedrez. De sus hazañas en el tablero y de sus momentos estelares: desde Greco a los niñ...
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- ISBN13 9788417229672
- ISBN10 8417229671
- Tipo LIBRO
- Páginas 432
- Colección Historia #
- Año de Edición 2018
- Idioma Castellano
- Encuadernación Rústica con solapas
Materias
JuegosEso no estaba en mi libro de Historia del ajedrez
Editorial EDITORIAL ALMUZARA
Esta es la historia jamás contada del juego de estrategia más practicado en el mundo así como de algunos de los hijos predilectos de Caissa, la diosa del ajedrez. De sus hazañas en el tablero y de sus momentos estelares: desde Greco a los niñ...
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Detalles del libro
Esta es la historia jamás contada del juego de estrategia más practicado en el mundo así como de algunos de los hijos predilectos de Caissa, la diosa del ajedrez. De sus hazañas en el tablero y de sus momentos estelares: desde Greco a los niños prodigio pasando por las exhibiciones de partidas simultáneas a la ciega, sin olvidar al showmande Pillsbury, Tal, Petrosian, Bronstein o Judit Polgár, la más extraordinaria jugadora de todos los tiempos. No faltará la aparición del Turco, y su «magia», que constituyó un acontecimiento sociológico de primer orden ni tampoco la crónica de esos supuestos autómatas que deslumbraron a multitudes en Europa y América. Particularmente novelesca, resulta la peripecia de los duendes o ajedrecistas profesionales que movían los hilos en la sombra. Antonio Gude, considerado uno de los mayores expertos de la historia del ajedrez moderno, nos cuenta de forma amena y divulgativa todos los instantes sorprendentes que han transcurrido en torno al tablero de los 64 escaques, como el Match del Siglo ocurrido en 1970 en Belgrado, cuando, por mínima diferencia, el triunfo de los soviético dejó constancia de su incuestionable hegemonía, a pesar de que Bent Larsen y Bobby Fischer defendían los primeros tableros de la selección mundial.