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«Para comerte mejor avanza desde el fondo como un zumbido lento pero desmesurado. El lector no tiene opción y debe ir a las profundidades. Hay que bajar donde nadie más se atreve, dice un personaje, esa es la obsesión de sus cuentos. Que bajemos ...

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  • Editorial ARISTAS MARTÍNEZ EDICIONES
  • ISBN13 9788494949890
  • ISBN10 8494949896
  • Tipo LIBRO
  • Páginas 192
  • Colección LIBROS SINGULARES #06
  • Año de Edición 2020
  • Idioma Castellano
  • Encuadernación Cartone
  • Audiencia General / "Trade"
  • Rango Edad de interés, años Desde 18 Hasta 99

Para comerte mejor

Autor Giovanna Rivero / Mayte Alvarado Simancas

Editorial ARISTAS MARTÍNEZ EDICIONES

«Para comerte mejor avanza desde el fondo como un zumbido lento pero desmesurado. El lector no tiene opción y debe ir a las profundidades. Hay que bajar donde nadie más se atreve, dice un personaje, esa es la obsesión de sus cuentos. Que bajemos ...

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Detalles del libro

«Para comerte mejor avanza desde el fondo como un zumbido lento pero desmesurado. El lector no tiene opción y debe ir a las profundidades. Hay que bajar donde nadie más se atreve, dice un personaje, esa es la obsesión de sus cuentos. Que bajemos al canal, al pabellón, que crucemos el monte y veamos esos cuerpos envenenados, inyectados y medicados, esas materias crudas con hambre, esas niñas preñadas, esos suicidas, esos esqueletos amorosos. Acá los personajes mueren, están a punto de morir o pertenecen a otro mundo. Pero por suerte el efecto de su escritura es doble y esos cuerpos sacrificados no dejan de ser sexuales, tentadores y fantásticos, porque son libres, de ahí que esa radicalidad sea también política.» Ariana Harwicz

«El mundo de Giovanna Rivero se tensa entre el pensamiento mágico de la cultura precolombina, lo sobrenatural de los relatos folclórico-maravillosos, el futurismo desolador de la ciencia ficción, y lo siniestro y lo monstruoso del género gótico. Un dejo o una pátina de tristeza deambula, como un mendigo perenne bajo los soles abrasadores y el aire pestilente, por los pueblos y los escombros urbanos, incoloros, de muchos de estos textos.»
Tomás Villegas

«Ajena a la tentación del exotismo y el costumbrismo, pero escarbando en un pasado ancestral, en esos rincones de la imaginación latinoamericana donde la escisión ilustrada entre naturaleza y cultura aún no ha sucedido, así es como la obra de Giovanna Rivero comulga con el imaginario de la tradición fantástica sin atarse a los clichés de los géneros y con un innovador espectro estilístico, explorando como una avezada patinadora una violencia atávica que se deja ver en el fondo de un lago congelado: el cadáver del realismo flotando bajo una fina capa de hielo, hurgando entre las arrugas y las grietas inestables de esa experiencia consensuada que llamamos realidad.»
Ana Llurba

«Me gusta mirar a la gente, esos rostros únicos que es casi seguro uno no volverá a ver jamás, me gusta adivinar sus preocupaciones, el deseo que no se extingue pese a la repetición de los viajes, de los incansables vagones y los periódicos huérfanos. Pero esta vez, en lugar de mirar, quería sentir la vibración del traqueteo, la electricidad subsidiaria del movimiento metálico envolviéndome como una madre. Eso quería, una electricidad madre en esa cavidad multípara que avanzaba con todas sus criaturas para lanzarlas a la vida. Comprendí mejor por qué los terroristas eligen los trenes, no se trata solo de una acumulación de gente, sino de la entrañable y fortuita filigrana de obsesiones pequeñas, deudas pequeñas, oficios concretos, pesadillas llenas de pudor e ingenuidad, egoísmos insignificantes, hastíos invisibles, en fin, todos los fuegos el fuego, como quien dice. Es eso lo que estalla con una bomba.»
(...)
«Siempre hablabas de irte, de largarte dejándolo todo, pero no podía creer que te hubieras decidido así, sin despedidas crípticas, a zambullirte en lo que llamabas ?las tinieblas definitivas? y que a mí me parecía una frase buena para un título, pero jamás para un viaje. Y no es que dudara de tu determinación, que siempre tuvo algo de suicida; todo lo contrario. La confirmación serena de la muerte me cubría de vacío y, al mismo tiempo, reforzaba todo aquello que te profesé: el modo absoluto en que creí, al principio no en tu talento ?que a ese respecto siempre te fui sincera?, sino en algo más importante y eterno que la capacidad de escribir: tu mirada temible y piadosa del mundo.»
(...)
«Mi padre decía que de lo primero que te expropiaba un buen trabajo ideológico era del corazón. Una vez empeñado el mecanismo de las ideas sentimentales, el resto era una dulce servidumbre, un fanatismo que nublaba incluso tu imagen en el espejo, como el vapor de la ducha que censura hasta tu más arriesgada desnudez.»
(...)
«El ala izquierda se divide entre arte y salud mental. Tiene lógica, pero no deja de haber cierto gesto irónico en semejante taxonomía, especialmente porque los únicos a los que se les permite desarrollar arte son los que han sido diagnosticados con algún desorden, un bache psíquico, un desajuste.»
(...)
«De todos modos, era natural que me durmiera en cualquier parte y que al despertar, con los pezones erectos ante el mínimo roce, sintiera, que ya venía siendo hora de que el anhelado feto agarrara algo de voluntad darwiniana e hiciera, por ejemplo, de sus fauces, un piquito; de sus tentáculos, unas piernas regordetas; de los globos inflamados, una mirada capaz de desmantelar nuestras más educadas mentiras. Era natural que una hipersensibilidad tan angustiante terminara contagiando a mi marido. Y es que si lo pensamos bien, estas hormonas que te fertilizan como a una vaca de verde pradera son como las feromonas: se huelen, se aspiran, se metabolizan.»

GIOVANNA RIVERO (Montero, Bolivia 1972). Vive en Lake Mary, Estados Unidos. Ha publicado libros de cuentos y novelas, entre los que destacan: Sangre dulce (La hoguera, 2006), Tukzon (2008), Niñas y detectives (Bartleby 2009, Finalista de los Premios Cálamo 2010), Para comerte mejor (Premio Dante Alighieri 2018. Sudaquia, El Cuervo, Final Abierto, 2015), 98 segundos sin sombra (Caballo de Troya, Random House, El Cuervo, 2014).
En 2006 recibe el Premio Nacional de Cuento Franz Tamayo por ?Dueños de la arena?. En 2011 fue seleccionada por la Feria Internacional del Libro de Guadalajara como uno de ?Los 25 Secretos Literarios Mejor Guardados de América Latina?. En 2015 recibió el Premio Internacional de Cuento Cosecha Eñe por ?Albúmina? (incluido en Para comerte mejor). En 2018, su novela 98 segundos sin sombra obtuvo el Premio Audiobook Narration: Best Spanish Voiceover por la Society of Voice Arts and Sciences (SOVAS); y ha sido recientemente adaptada al cine por el cineasta boliviano Juan Pablo Richter.

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