Margarida Xirgu no solo destacó como una de las actrices más arriesgadas y renovadoras del teatro catalán de principios de siglo, sino que también triunfó en la escena española en la década de los veinte y primeros años treinta. En las repúblicas latinoamericanas dejó una huella indeleble, que aún pervive hoy en día. Las entrevistas recogidas confirman que Xirgu, como artista, se entregó en cuerpo y alma al teatro; como ciudadana, se posicionó a favor de políticas progresistas de justicia y solidaridad sociales y, como mujer, reivindicó el sufragio femenino. Políticamente, se mostró a favor del Estatut d'Autonomia de Catalunya de 1932 y, entre otras, asumió la presidencia de la Delegación en Uruguay de la Generalitat de Catalunya en el exilio. El contenido se ha ordenado cronológicamente en dos grandes partes: 1910-1936 i 1936-1962 y recoge las entrevistas aparecidas en publicaciones catalanas, españolas y latinoamericanas que, además, tienen el valor de sugerir los contextos históricos y políticos, sociales y escénicos en los que Xirgu se movió, y también la geografía y los ambientes teatrales de las numerosas ciudades en las que actuó en Europa y en América.