Después de Cuéntamelo todo se podría pensar que ya está todo dicho sobre el
cuerpo y la pubertad, sobre el amor y la sexualidad. Ni mucho menos: las alumnas y alumnos de primaria que participan en los talleres de la pedagoga sexual y autora de este aclamado libro, siguen teniendo muchas preguntas que depositan de manera anónima en su buzón.

¿Qué diferencia hay entre estar loco por alguien y estar enamorado?
¿Puede romperse el pene?
¿Cómo tienen sexo los que van en silla de ruedas?

Muchas de estas cuestiones dejan entrever que Internet es el primer sitio al que los y las jóvenes acuden cuando tienen dudas y también, que la información que obtienen allí no siempre es la más adecuada. Así pues, Cuántame más cosas es un libro tan necesario como su antecesor.
En este segundo volumen ?con nuevas preguntas de los chicos y chicas? encontrarán más respuestas claras y honestas que pueden leer según el orden que quieran; y todo esto acompañado, como siempre, por las magníficas ilustraciones de Anke Kuhl.

«Una lectura imprescindible para los y las más jóvenes, indudablemente una buena opción de regalo». Andrea Kachelrieß, Stuttgarter Nachrichten

«¡Una obra fundamental para la clase y para casa!». AJuM Sachsen

«Muy recomendable sobre todo para las bibliotecas escolares». ekz. bibliotheksservice

«A algunas personas les puede parecer un poco fuerte, pero a mí me parece magnífico. Se habla de prepucios, de pornografía y de pedos vaginales y de muchas más cosas que a mí, como madre, me hacen subir la temperatura, cuando mi hijo me pregunta por ellas. Entonces me acuerdo de que tenemos este libro y que puedo surfear en el tema del sexo dejándome llevar por el tono desinhibido del mismo». Rike Drust, kinstabuch

Anke Kuhl (Alemania, 1970) trabaja como ilustradora en el taller colectivo LABOR, en Fráncfort. Ha conseguido el premio Eulenspiegel al mejor álbum ilustrado. En Takatuka encontrarás también sus libros ¡En familia!, premiado con el Premio de Literatura Infantil y Juvenil de Alemania 2011, ¡Qué rico!, Lola se embala y Mis trucos para sobrevivir a la clase de natación.