*WINNER OF THE 2017 MAN BOOKER INTERNATIONAL PRIZE**

The award-winning and internationally acclaimed author of the To the End of the Land now gives us a searing short novel about the life of a stand-up comic, as revealed in the course of one evening’s performance. In the dance between comic and audience, with barbs flying back and forth, a deeper story begins to take shape—one that will alter the lives of many of those in attendance.

In a little dive in a small Israeli city, Dov Greenstein, a comedian a bit past his prime, is doing a night of stand-up. In the audience is a district court justice, Avishai Lazar, whom Dov knew as a boy, along with a few others who remember Dov as an awkward, scrawny kid who walked on his hands to confound the neighborhood bullies. Gradually, as it teeters between hilarity and hysteria, Dov’s patter becomes a kind of memoir, taking us back into the terrors of his childhood: we meet his beautiful flower of a mother, a Holocaust survivor in need of constant monitoring, and his punishing father, a striver who had little understanding of his creative son. Finally, recalling his week at a military camp for youth—where Lazar witnessed what would become the central event of Dov’s childhood—Dov describes the indescribable while Lazar wrestles with his own part in the comedian’s story of loss and survival. Continuing his investigations into how people confront life’s capricious battering, and how art may blossom from it, Grossman delivers a stunning performance in this memorable one-night engagement (jokes in questionable taste included).

El autor galardonado y aclamado internacionalmente de Hasta el fin de la tierra ahora nos ofrece una novela breve sobre la vida de un comediante, como se revela en el curso. de la actuación de una noche. En el baile entre el cómico y la audiencia, con púas volando de un lado a otro, una historia más profunda comienza a tomar forma, una que cambiará la vida de muchos de los asistentes.



En un pequeño antro en una pequeña ciudad israelí, Dov Greenstein, un comediante que ya pasó su mejor momento, está haciendo una noche de stand-up. En la audiencia se encuentra un juez de la corte de distrito, Avishai Lazar, a quien Dov conoció cuando era niño, junto con algunos otros que recuerdan a Dov como un niño torpe y flacucho que caminaba sobre sus manos para confundir a los matones del vecindario. Gradualmente, mientras se tambalea entre la hilaridad y la histeria, la charla de Dov se convierte en una especie de libro de memorias que nos transporta a los terrores de su infancia: nos encontramos con su hermosa flor de madre, una sobreviviente del Holocausto que necesita un control constante, y su padre castigador. , un luchador que tenía poca comprensión de su hijo creativo. Finalmente, Al recordar su semana en un campamento militar para jóvenes, donde Lazar fue testigo de lo que se convertiría en el evento central de la infancia de Dov, Dov describe lo indescriptible mientras Lazar lucha con su propio papel en la historia de pérdida y supervivencia del comediante. Continuando con sus investigaciones sobre cómo las personas se enfrentan a los golpes caprichosos de la vida y cómo el arte puede florecer a partir de ellos, Grossman ofrece una actuación impresionante en este memorable compromiso de una noche (chistes de dudoso gusto incluidos).