Memorias de los últimos días de Byron y Shelley
Editorial ALBA EDITORIAL, S.L.U
España peninsular
E. J. Trelawny, marino, quizá pirata, escritor y aventurero, encarnación andante del héroe byroniano y rendido entusiasta del genio de Shelley, vivió junto a los dos poetas sus últimos días, de los que estas Memorias (1858) son una crónica ...
Leer más...- Editorial ALBA EDITORIAL, S.L.U
- ISBN13 9788490656419
- ISBN10 849065641X
- Tipo LIBRO
- Páginas 368
- Colección MINUS #
- Año de Edición 2020
- Idioma Castellano
- Encuadernación Rústica
Materias
Bolsillo En CastellanoMemorias de los últimos días de Byron y Shelley
Editorial ALBA EDITORIAL, S.L.U
E. J. Trelawny, marino, quizá pirata, escritor y aventurero, encarnación andante del héroe byroniano y rendido entusiasta del genio de Shelley, vivió junto a los dos poetas sus últimos días, de los que estas Memorias (1858) son una crónica ...
España peninsular
Detalles del libro
E. J. Trelawny, marino, quizá pirata, escritor y aventurero, encarnación andante del héroe byroniano y rendido entusiasta del genio de Shelley, vivió junto a los dos poetas sus últimos días, de los que estas Memorias (1858) son una crónica privilegiada. Trelawny descubrió e incineró el cuerpo de Shelley en la playa de Massa, y siempre guardó tributo a su delicadeza y generosidad; veló más tarde el cadáver de Byron en Missolonghi, y aprovechó la ocasión para inspeccionar de cerca los misterios de su cojera. En una mezcla insólita de libro de viajes, estudio psicológico, biografía de artista e historia épica, estas memorias son tanto un vivo documento como un original empeño de creación literaria.
Edward John Trelawny nació en 1792. En 1822, en Pisa, Thomas Medwin le presentó a Shelley, y este a Byron: de su relación con ellos, y en su calidad de privilegiado testigo de las circunstancias de la muerte de ambos, dio cuenta en Memorias de los últimos días de Byron y Shelley (1858), que revisaría y aumentaría en 1878 en Records of Shelley, Byron and the Author. Murió en Sompting en 1881, pero sus restos fueron llevados a Roma y enterrados junto a los de Shelley.