Mujeres caídas
Editorial ANAYA
España peninsular
MUJERES CAÍDAS(*CR*)Prostitución legal y clandestina en el franquismo(*CR*)El oficio de tinieblas de la propaganda franquista sobre su régimen logró velar su perfecto entendimiento con el mundo de la prostitución. Tras el corsé gris e inquisito...
Leer más...- Editorial ANAYA
- ISBN13 9788496052239
- ISBN10 8496052230
- Tipo LIBRO
- Páginas 222
- Año de Edición 2003
- Idioma Castellano
- Encuadernación Tela
Mujeres caídas
Editorial ANAYA
MUJERES CAÍDAS(*CR*)Prostitución legal y clandestina en el franquismo(*CR*)El oficio de tinieblas de la propaganda franquista sobre su régimen logró velar su perfecto entendimiento con el mundo de la prostitución. Tras el corsé gris e inquisito...
España peninsular
Detalles del libro
MUJERES CAÍDAS(*CR*)Prostitución legal y clandestina en el franquismo(*CR*)El oficio de tinieblas de la propaganda franquista sobre su régimen logró velar su perfecto entendimiento con el mundo de la prostitución. Tras el corsé gris e inquisitorial del movimiento se escondió el vivo mercado de la carne mercenaria, legal hasta 1956.(*CR*)Las más pobres, las más marginales de las meretrices se lanzaban "por libre", fuera del dogal de las mancebías -pero con la argolla de la miseria al cuello-, a la prostitución clandestina. Ellas fueron el objetivo de la Obra de Redención de Mujeres Caídas, creada en 1941, para regenerar a las detenidas con dosis de "ora et lavora" en cárceles y establecimientos religiosos. La dimensión social del problema se hallaba en la pobreza y degradación a que se vieron sometidos los trabajadores y los vencidos en la posguerra. Las familias más desventuradas, con los padres fusilados o en las cárceles, la viudedad en vida con décadas de encierro, los hijos menesterosos y su hambruna perpetua, lanzaron a aquellas procedentes de sectores marginales a la calle.(*CR*)La preocupación gubernamental por la prostitución abierta y callejera, que sonrojaba a las autoridades y desvestía su doble moral, sólo fue parte de la tramoya. En realidad, fue el crecimiento vertiginoso de las enfermedades venéreas lo que provocó la guarda y custodia de esas mujeres tras los muros conventuales. La miseria y el oscurantismo echaron su telón sobre la vida marginal en la posguerra.(*CR*)