En el centenario del nacimiento de Shostakóvich, Mijaíl Árdov, amigo de juventud de los hijos del gran compositor, nos acerca a la figura cotidiana de uno de los mayores genios musicales del siglo XX. Los cálidos testimonios aquí recogidos trascienden el mito y, más allá de las partituras, nos permiten descubrir a un padre de familia preocupado por el sano crecimiento y desarrollo de sus hijos, a un hombre de carne y hueso incurso en un desigual combate contra un sistema político irracional, del que trata de defenderse con las dos únicas armas que sabe esgrimir: la batuta y el humor; de un genio musical empeñado en componer música sin seguir el compás oficialista...

Las amenas anécdotas que se suceden en la narración van acompañadas a su vez de fotos que muestran los momentos más entrañables de la vida de la familia Shostakóvich y que nos ayudan a conocerle, en su intimidad, en el trasfondo de su creación.

Mijaíl Árdov se licenció en la facultad de Periodismo de la Universidad de Moscú en 1960. Durante los siguientes veinte años, alcanzó gran reputación como hombre de letras, colaborando con diversas revistas. En 1980 tomó los hábitos de la iglesia ortodoxa rusa. Ejerció su ministerio, principalmente en provincias, hasta 1993, en que fue nombrado deán de la iglesia del mártir Nicolás II de Moscú. Además de ser autor de diversos libros de memorias, Mijaíl Árdov también escribe a menudo sobre asuntos relacionados con la vida