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Si esto es un hombre

Autor Primo Levi

Editorial EDICIONES PENINSULA

Si esto es un hombre
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Si esto es un hombre, el libro que inaugura la trilogía que Primo Levi dedicó a los campos de exterminio, surgió en la imaginación de su autor durante los días de horror en Auschwitz, cuando la&nb...

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  • Editorial EDICIONES PENINSULA
  • ISBN13 9788499422886
  • ISBN10 8499422888
  • Tipo LIBRO
  • Páginas 224
  • Colección Imprescindibles (Península) #
  • Año de Edición 2015
  • Idioma Castellano
  • Encuadernación Rústica con solapas

Si esto es un hombre

Autor Primo Levi

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Si esto es un hombre, el libro que inaugura la trilogía que Primo Levi dedicó a los campos de exterminio, surgió en la imaginación de su autor durante los días de horror en Auschwitz, cuando la&nb...

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Detalles del libro

Si esto es un hombre, el libro que inaugura la trilogía que Primo Levi dedicó a los campos de exterminio, surgió en la imaginación de su autor durante los días de horror en Auschwitz, cuando la principal preocupación de los prisioneros era que, de sobrevivir, nadie creería la atrocidad de la historia vivida. Los campos de concentración y exterminio, más que resguardados por las alambradas y los guardias, lo estuvieron por su propia monstruosidad, que los hacía inconcebibles.

Lo que se puede aprender sobre el ser humano y sobre la Historia de Europa en el siglo xx en los tres volúmenes de la gran trilogía memorial de Primo Levi es terrible y también aleccionador, y honradamente no creo que sea posible tener una conciencia política cabal sin haberlos leído, ni una idea de la literatura que no incluya el ejemplo de esa manera de escribir. Antonio Muñoz Molina


La capacidad de observar es la gran cualidad de Primo Levi. Italo Calvino


Levi no gritaba, no insultaba, no acusaba, porque no quería gritar; quería mucho más que eso: quería hacer gritar. Renunciaba a su propia reacción, para dar lugar a la reacción de todos nosotros. Su razonamiento era de largo aliento. Su moderación, su suavidad, su sonrisa, que tenía algo de tímido, casi infantil, eran en realidad sus armas. Ferdinando Camon