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Cuesti¢n migratoria y Estado de Derecho van de la mano. En primerlugar, porque los Estados de la UE no pueden dejar solas ydesprotegidas a miles de personas en condici¢n de especialvulnerabilidad, que llegan al territorio de la UE, para salvar susvidas, porque se arriesgan a ser perseguidos y a sufrir violencia porla existencia de contextos de involuci¢n democr tica o por lapresencia de un conflicto b?lico o de una cat strofe ambiental. Ser¡acontrario a los principios b sicos de los modernos Estadosconstitucionales de Derecho, pero adem s significar¡a tener pocamemoria porque la UE se ha convertido en tierra de acogida solo en las £ltimas d?cadas, antes ha sido durante largo tiempo tierra deemigraci¢n. ¨Pero por d¢nde empezar a gestionar este fen¢meno? Sedeber¡a comenzar por d¢nde inici¢ todo, es decir por el derecho deasilo. Se deber¡a repensar el alcance, el contenido, los l¡mites y los efectos de este instituto, sobre el que se ha construido el Seca y se han desarrollado los institutos afines de protecci¢n internacional, y ver c¢mo la UE y sus Estados miembros pueden protegerlo dentro de sus confines, as¡ como m s all  de sus fronteras en los Estados de origen y tr nsito de la inmigraci¢n, considerando la dimensi¢n interna, as¡como la dimensi¢n externa de la pol¡tica migratoria. Por todo ello, la presente obra se propone contribuir a la elaboraci¢n de una nuevaconfiguraci¢n del derecho a la protecci¢n internacional, a trav?s dela extensi¢n de su alcance y contenido a un mayor n£mero de personas,del desarrollo de v¡as de acceso legal y de mecanismos deexternalizaci¢n y control de las fronteras, con la inclusi¢n de lasherramientas de IA, que respondan a un enfoque basado en los derechoshumanos.