No est  de moda hablar de la Iglesia, salvo que sea para criticarla oatacarla. Al menos eso parece deducirse del tratamiento que, de manera mayoritaria, se hace de las noticias relacionadas con ella en losmedios de comunicaci¢n y en conversaciones informales de amigos. Estohace del presente volumen algo contracultural, dado que buscacomprender la naturaleza y finalidad de la Iglesia, as¡ como su vida y desarrollo en el tiempo, asumiendo que se trata de una obra divinapara ofrecer al ser humano el amor y la salvaci¢n de Cristo.



Pero tambi?n es contracultural en clave interna.Porque, quiz , la mirada que predomina con frecuencia cuando susmiembros hablan de ella es aquella que se fija en las estructuras,instituciones y aspectos, podr¡amos decir, de ?mera organizaci¢ninterna?. En cambio, nuestra mirada pretende ser fundamentalmentedesde Dios y su plan para ella.



De esta manera,tras una introducci¢n que acota y sit£a la eclesiolog¡a comodisciplina teol¢gica, este volumen aborda, en primer lugar, el origendivino de la Iglesia para despu?s hacer un acercamiento a ella desdesu relaci¢n con cada persona de la Sant¡sima Trinidad. Esto secomplementa, en los dos £ltimos cap¡tulos, con la consideraci¢n de laIglesia como signo e instrumento de comuni¢n y con la mirada a sudestino £ltimo y a Santa Mar¡a que es su imagen y modelo.



Por £ltimo se han a¤adido al final una serie de preguntasfrecuentes sobre la Iglesia. Cuestiones que, si bien no son parte deun tratado teol¢gico sobre ella, sin embargo puede resultar £tilencontrarlas abordadas, aunque sea de manera muy breve, en el contexto de un libro de esta naturaleza.