La tesis doctoral se centra especialmente en el auge del fenómeno del mercenariado que tras la guerra del Peloponeso vivió la Hélade hasta el final de la guerra de Corinto (Paz del Rey). En este sentido, las explicaciones hasta la fecha ofrecidas por la historiografía explotaban argumentos de carácter más político que científico, al considerar a los mercenarios como simples pobres, marginados sociales en el mundo de la pólis o aventureros. En resumen, los mercenarios eran considerados por la escuela marxista como simple 'proletariado' (palabra de la cual deriva el término 'mercenariado') o, para la escuela liberal, como propietarios avariciosos que pretendían hacerse ricos mediante el saqueo de tierra en el exterior. Lejos de estas interpretaciones, nuestra tesis defiende que los mercenarios eran individuos que luchaban en defensa de un proyecto político concreto y de ahí la necesidad de vincular este auge a que hacíamos referencia más arriba a las relaciones internacionales del momento. Así pues, el tras la guerra del Peloponeso se iniciaría un proyecto imperialista, esto es, de dominación de otras comunidades griegas, por parte de Esparta, vencedora de la guerra contra Atenas, y eso explicaría el auge significativo (en ningún caso 'masivo', como ha sido argumentado) del fenómeno del mercenariado en la Grecia del siglo IV a.C., ya sea en defensa de él como para reaccionar contra el mismo.