Si ahora mismo tenéis este libro en las manos, es que ya os ha llegado la preocupación por el uso descontrolado de la tecnología, especialmente en el caso de vuestros hijos. Leyéndolo, obtendréis argumentos para prepararos para afrontar el cambiante panorama tecnológico, poniendo sobre la mesa los usos y las costumbres que hemos ido adquiriendo, menores y adultos, con el teléfono inteligente. Porque nada de lo que ocurre en la familia es culpa del móvil. Tan solo es una máquina manejada por humanos, a veces, bastante inexpertos. En esta lectura encontraréis un método para que, a partir de vuestro comportamiento individual, creéis una ética digital compartida y aceptada por vuestra familia y, quizás, por vuestro entorno social inmediato. La última parte del libro os concienciará para que toméis las riendas de la educación digital y mediática de vuestros hijos, formulando varias propuestas de organización que os guiarán hacia la incorporación saludable de las nuevas tecnologías en vuestro día a día, y su conciliación con la vida familiar.