En este primer volumen se trata de los momentos más «teóricos» del sistema: del Conocimiento, de la Realidad y el Valor, de la Teo-cosmología y del Lenguaje. Los más «prácticos» (en la medida en que esta distinción tiene sentido en Platón) se abordan en el segundo volumen.

Se ofrece en este libro un comentario a los textos de Platón en la forma de una reconstrucción de su sistema filosófico, atendiendo tanto a su unidad o idea fundamental como a su multiplicidad de aspectos, y poniéndolo en discusión con las otras grandes concepciones filosóficas que se han dado desde Grecia hasta hoy. Es innecesario defender el valor de la obra de Platón, tanto en sí misma como (por eso) para nosotros, y, en consecuencia, la pertinencia de su constante relectura. El tan conocido como enigmático pensamiento de aquel filósofo griego se yergue como principal alternativa a los pensamientos que definen nuestra época tardo-moderna, de modo que es para ellos su esfinge y su piedra de toque. Incluso si, de acuerdo con cierta popular historia, Platón representa el gran error, del que los hombres deberíamos deshacernos definitivamente, será necesario antes conocerlo bien, no sea que peleemos con una sombra. Pero ¿no podría suceder que su concepción de la realidad y su valor, que aquí interpretamos (en lectura de tipo «clásico») como intelectualista, metafísica y dialéctico-analógica, poseyese algún germen o modelo de un pensamiento futuro, tras el agotamiento de la postmetafísica y los otros «post» del último siglo?