La escritora de novelas policiacas Laura Bosch está sufriendo un sutil pero constante acoso por parte de desconocidos cuando pide ayuda a su amiga Berta, que es detective. Laura tiene dos hijos ya independizados y vive sola en una casa aislada desde la muerte de su marido Ramón Carola, un reputado científico, fallecido en un incomprensible accidente de tráfico junto a una desconocida que viajaba con él al regresar de una cena, organizada por la empresa de investigación en la que trabajaba temporalmente. Con el paso de los días, la protagonista se siente agobiada e indefensa porque comienza a percibir cosas raras, sospecha incluso que la vigilan y que han entrado en su vivienda buscando algo que no tiene o, si lo tiene, no sabe qué es. Laura Bosch piensa que aquel incomprensible accidente pudo no ser tal cosa y, en cualquier caso, lo poco que va descubriendo la induce a creer que la empresa en la que trabajó Ramón, de la que ni siquiera conoce el nombre, es demasiado opaca. Desquiciada, recuerda que días antes del siniestro su marido estaba angustiado y taciturno. No le dijo la causa, solo afirmó que en aquella cena pensaba hallar respuestas y que se lo explicaría todo cuando tuviera las cosas claras.