I Athína se allepállila lokntáoun. I koinonía dicházetai kai oi synkroúseis plithaínoun. O astynómos Charítos voutáei páli sta vathiá. Prépei na lýsei dýo grífous pou de faínetai na syndéontai metaxý tous: mia seirá apó aftoktoníes, allá kai mia seirá apó dolofoníes giatrón. Kai san na min tou éftanan óla aftá, prépei na antimetopísei tis epiptóseis ton synthikón sta méli tis oikogéneiás tou.
To Kínima tis Aftoktonías eínai éna mythistórima tou diethnoús syngraféa Pétrou Márkari gia tin pandimía, to chásma ton geneón kai ton antilípseón tous, allá kai ti sýnkrousi tis aftothysías me ti vía kai to énklima. (Apó tin parousíasi sto opisthófyllo tou vivlíou)

 

Atenas en cierres sucesivos. La sociedad está dividida y los conflictos aumentan. El oficial de policía Charitos vuelve a sumergirse en las profundidades. Debe resolver dos acertijos que no parecen estar conectados: una serie de suicidios, pero también una serie de asesinatos de médicos. Y como si todo eso no fuera suficiente, tiene que lidiar con los efectos de las condiciones en los miembros de su familia.
El movimiento suicida es una novela del escritor internacional Petros Markaris sobre la pandemia, la brecha entre generaciones y sus percepciones, pero también el conflicto del autosacrificio con la violencia y el crimen. (De la presentación en la contraportada del libro)