Amaya nos deja entrar en su vida para poder conocer y entender todos sus sentimientos contradictorios durante esta etapa de su vida, desde el período juvenil hasta su madurez.Se basa en la elección constante sobre decisiones de índole amoroso. Ella está y estará eternamente enamorada de Ismael, su profesor, durante toda la historia. Amaya da por hecho que el destino está escrito y sus vidas están ligadas. Por muy lejos que estén el uno del otro, por mucho tiempo que pasen sin verse, siempre acaban encontrándose y florecen de nuevo esos sentimientos que han pretendido enterrar para no volver a sufrir. Todos tenemos un hilo rojo atado a nuestro meñique, y ese hilo no anda suelto, siempre está ligado en su otro extremo a otra persona. Por mucho que queramos olvidar a ese alguien, por mucho que queramos enamorarnos de otra persona para no padecer por amor, hay veces que no tenemos opción y tenemos que dejar que el destino juegue su papel.En este caso, ambos saben perfectamente que no po