La principal preocupación de este libro es la relación entre la identidad y el lugar habitado. A través de una serie de reflexiones radicadas en la experiencia y la implicación, Samy Reyes explora la influencia que la territorialidad ejerce sobre nosotrxs y los desafíos que dicha influencia propone o exige. Esta es una reflexión de marcado espíritu activista, donde se abordan temas como la relación entre cuerpo y espacio, la permeabilidad de la personalidad, el efecto determinante de distintos discursos e instituciones y la importancia del deseo en el surgimiento de la disidencia. La teoría y las vivencias personales se encuentran al mismo nivel en este análisis exhaustivo, ofreciendo un testimonio híbrido con el que Reyes responde a la cuestión de cómo utilizar nuestro deseo para enfrentarnos a las normas sociales y construir nuevos ámbitos de territorialidad queer.La identidad es aquí sinónimo de resistencia, vanguardia, límite.

Samy Reyes (Sur Global, 1996). A los seis años, a través de un acto de travestismo lúdico, se reconoció sexo disidente. Desde entonces le es imposible nombrarse bajo los términos de la identidad. En la infancia, hablaba poco pero preguntaba mucho. En la adolescencia, por procesos de migración y supervivencia, se mudó a Ciudad de México con su familia, volviéndose una subjetividad nómada y ciudadano perpetuo del Sur Global, su verdadera Patria. En esa temporada, fue diagnosticado con el Trastorno de Ansiedad Generalizada (TAG) y convirtió la literatura en su medicina (y veneno) alternativa. La escritura, por otro lado, llegó como la forma de imaginar otros mundos posibles y de combatir la destrucción del mundo actual y de sus formas de impiedad y agonía. Desde el 2019, todos los días escribe un poema que deshecha al anochecer o que abandona adentro de libros de personas desconocidas. Lleva consigo siempre un diario. Realizó estudios de Filosofía, Lengua y Literaturas Hispánicas en la Universidad Nacional Autónoma de México. En su tesis de Filosofía exploró el pensamiento sobre la razón-poética de María Zambrano. Sus reflexiones iniciales estuvieron influenciadas por Virginia Woolf, Sylvia Plath, Alejandra Pizarnik y Rafael Cadenas. Actualmente, práctica la filosofía rizomática de Gilles Deleuze, Félix Guattari y Néstor Perlongher, así como la filosofía poética-plástica de Catherine Malabou y María Zambrano. Llegó a la teoría queer por vía francesa y española, a través de Paul Preciado y Monique Wittig. Hoy podría considerarse travesti de trinchera o simplemente Kuir con K de Anarkia.