La palabra, especial instrumento del esp¡ritu para ®decir¯ la vida del cuerpo y del alma, alcanza una vida propia cuando resuena como eco de la Palabra trascendente que, seg£n la fe b¡blica, descendi¢ hasta los hombres en la persona de Jes£s de Nazaret. Por ello, hemos ido dandorealce a la que Él pronunci¢ y fue filtrada por los evangelios. Desdeque sali¢ de su boca, ella hizo su recorrido hasta encontrar alreceptor de cada tiempo, con mayor o menor eficiencia de acuerdo conlas disposiciones de recepci¢n y ®traducci¢n¯. Y nos dimos cuenta deque no basta con o¡r el sonido de la palabra en el evangelio, altavozque la transporta hasta el presente. Es necesario abrir su corteza yliberar el esp¡ritu, divina luz que ella encierra, esperando quealguien la escuche, la ®interprete¯ en el drama de la vida y latransforme en la verdad que libera. (?) Las meditaciones de este libro pretenden ayudar a hacer la interpretaci¢n de la palabra b¡blica enfragmentos de vida, adherida a la exhortaci¢n del disc¡pulo queescuch¢, en directo, la Palabra y experiment¢, en persona, el Amor:®no amemos de palabra ni con la boca, sino con obras y seg£n laverdad¯ (1Jn 3,18).