Esta «Historia cultural del arte moderno» (*CR*)quisiera abrir líneas de revisión y de (*CR*)investigación con el fin de profundizar en las (*CR*)causas y los desarrollos de esta revolución (*CR*)moderna en el arte, de actualización de (*CR*)nuevas problemáticas que no han dejado (*CR*)de transformar la pintura y la escultura (*CR*)hasta la fecha. Los pintores no rompieron (*CR*)alegremente con la tradición arcaizante del (*CR*)Renacimiento, lo hicieron porque la (*CR*)modernidad les obligó a ello. Cambió su (*CR*)espacio imaginario. ¿Cómo y por qué?(*CR*) El primer tomo subtitulado «De David a (*CR*)Cézanne» se detiene en el momento en (*CR*)que la revolución del arte moderno se (*CR*)impone frente al arte tradicional, hasta el (*CR*)punto de derribar el sistema de Salón, de (*CR*)penetrar en el museo de Luxemburgo (*CR*)formando parte del legado Caillebotte o de (*CR*)ocupar una sala en la exposición Universal (*CR*)de 1900.