Benito Pérez Galdós entra en el sueño común de la gran novela decimonónica, conjunto de anécdotas que mantuvo la integridad de la imaginación colectiva durante un siglo de cambios radicales. Sus novelas, su teatro y sus cuentos no sólo representan la realidad social de sus lectores, sino que con su anecdotario configuran también su aspiración y temores, dentro del gran ritmo semántico de la humanidad: sus mitos fundamentales. En esto, Galdós es un ejemplo universal de una práctica narrativa común al realismo europeo en general. A lo largo y ancho de la creatividad galdosiana, la imaginación mitológica aparece como fundamento. Las grandes historias paganas y cristianas imantan los signos de sus anécdotas cotidianas. Su obra es una representación de la imaginación mitológica de su siglo.