Están aquellos que no saben si dejar a su mujer y se deprimen. Aquellos que se deprimen porque cada mañana no funciona el ascensor del Ministerio. Aquellos que cada mañana deben ir a los obradores a pedir dinero. Aquellos que antes han tenido mucho dinero y ahora lo han perdido todo. Aquellos que han perdido un hijo y ya no quieren sufrir. Aquellos que han sufrido y quieren volver atrás. Aquellos que a fuerza de pensar en el pasado no hacen más que engordar.
La conservación de los afectos es como una novela coral en la que todos tienen la misma obsesión: ¿cuántas ocasiones tenemos en la vida para aprender?

En estos relatos Antonio Pascale retrata una clase media distraída que tiene que vérselas con los cambios de la sociedad y los privadísimos fracasos individuales. Siete relatos entrelazados, que expresan con melancólica ironía los irreparables códigos de la vida.