Miguel Ángel Martín ofrece un extenso relato a color para invitar a surfear por el océano oleaginoso de la sociedad postindustrial. Una crónica implacable del nuevo mundo que nos rodea. Pinta un fresco generacional, coral y poliédrico, que representa, a la manera de las alegorías medievales y renacentistas, toda una metáfora despiadada del mundo. Quienes no tengan miedo se reconocerán también como parte del espectáculo, encontrando en las viñetas, con sorpresa, horror y fascinación, su propia vida impresa. Martín conoce y está dentro de todos y cada uno de sus personajes, los entiende sin empatizar con ellos, los comprende sin juzgarlos, y les deja actuar con la naturalidad con que lo harían en el mundo real. A ello se añade la cualidad visionaria de sus anticipaciones tecnológicas, sociológicas e incluso psicológicas, que revelan a un artista embebido y conocedor experto de la ciencia y la sociedad de su tiempo. En palabras del prologuista, Jesús Palacios, «es imposible no sentirse turbado y perturbado por su obra». El volumen se completa con la miniserie inconclusa «Jelly Beans», publicada en los números que precedieron al cierre de El Víbora, y otros tres relatos cortos que aparecieron en números extras de la misma revista.
El Autor.
Miguel Angel Martín, (León 1960), dibujante y guionista de cómics premio Yellow Kid 2000 al mejor autor (el equivalente al Óscar de la historieta) ha publicado numerosos volúmenes de cómic en España, Italia y Francia, entre ellos la novela gráfica Playlove (REY LEAR, 2008). Escribió la obra de teatro Kyrie Nuevo Europeo, dirigida por Pepe Mora y el guión del cortometraje en 35 mm basado en el cómic SNUFF 2000, y dirigido por el también dibujante y cineasta Borja Crespo. De su extensa producción en el cómis destacan Brian the Brain, RubberFlesh, Keibol Black, The Space Between, Anal Core, Snuff 2000, Psychopathia Sexualis, Big Whack!, Crónica Negra, Días felices, Cyberfreak, SicotronicRecords, NeuroHabitat y Playlove Además de obtener el Yellow Kid, ha sido premio Autor Revelación del Salón Internacional del Cómic de Barcelona en 1992, ganó el Gran Premio «Attilio Micheluzzi» (Nápoles, Comicon, 2003), el Premio al mejor comic europeo Romics 2006 (Roma) y el concedido por los lectores RepubblicaXL al mejor comic del año (Nápoles Comicon 2007).