" Más allá de los umbrales de la mente humana" es un libro de investigación científica basada en datos de estudios empíricos, anécdotas personales, y vivencias de diferentes pacientes psiquiátricos en medio de institucionalización, como Clínicas de Recuperación psiquiátrica, Hogares de niños del INAME, Clínicas de Enfermos terminales; y distintos lugares de reclusión, cárceles, orfanatorios y otros, que se dedican a reclutar enfermos. Así como, las vivencias de ellos en estos lugares fríos, solitarios, donde los abusos físicos y psicológicos; son solo el comienzo y el " bautismo típico", de todo aquel que entra, no importando su situación socio-económica. El libro plantea un viaje que cada lector deberá realizar en soledad, hacia su mundo interior, en esa casa tenebrosa, oscura y poco entendida y conocida por nosotros mismos. No será una lectura fácil en cuanto a que se encontrará con muchas puertas en esa casa; puertas que no desea recordar y menos aún estar en ellas. La información científica sobre diferentes trastornos mentales es emanada de mi experiencia profesional como psicopatóloga, desde hace más de veinte años, en Instituciones públicas y privadas. Si bien, existen temáticas que pueden resultar escabrosas, se aconseja la lectura del material, previa autorización de personas adultas. La realidad del Uruguay de hoy, incluye a las personas que viven en situación de calle, que presentan trastornos delirantes, aquellas que aún, no estando recuídas ofrecen un verdadero peligro para todo aquel que lo rodee. También así, los niños que viven en un mundo aparte de su edad y su situación emocional. El material ha tenido en cuenta el no identificar a los diferentes enfermos portadores de múltiples cuadros clínicos, por razones éticas. En los casos que sí se han mencionado; ha sido con la debida autorización de sus curadores, pero son la minoría de los casos. En todos los casos las personas descriptas son reales, la mayoría de ellas se encuentran recorriendo las mismas calles que nosotros a todas las horas del día y en otros; recluidas como desde hace muchos años, pero con mínimas medidas de prevención. Existen puertas dedicadas a la droga, al suicidio; entre otras; sería recomendable la lectura previa de un adulto y posteriormente la discusión del tema, ya que contiene estrategias terapéuticos concretos, tanto para el que presenta ideación suicida como para la familia. Este viaje, personal y único, puede no ser leído en la totalidad; ya que contiene descripciones que no se aconsejan a personas que no están familiarizadas con el tema de la muerte, el homicidio, el incesto y los repertorios comportamentales de las personas con cuadros psicóticos, psicopáticos y sociopáticos. El libro no tiene un sentido sensacionalista, sino el exponer una realidad que va mucho más allá de lo que podemos ver en un informativo o una entrevista televisiva arreglada con propósitos que están muy alejados del interés en el mejoramiento de estos individuos. Espero que juntos, hagamos este viaje, aunque en casas diferentes, veremos que las puertas no son muy diferentes. La puerta del infierno, así como la puerta de la muerte, si UD se anima a transitarla; encontrará que muy lejos existirá en otra casa otra luz encendida; quizás una persona estará llorando, arricondado en el piso, simplemente fotos, o jugando con sus antiguos juguetes y la ropa del baúl de al abuela. Espero que Ud. pueda disfrutarla, quizás con dolor pero sabiendo que existe una salida, en algún lugar, en algún momento. Aunque si desea quedarse en alguna de estas puertas, sabrá en todo momento que puede hacerlo. Aunque siempre existe el peligro, en este laberinto de su mundo interior; el que no encuentre la salida, o ya no desee salir. Verá que aquellos y nosotros, en realidad, no somos tan diferentes y que las casualidades no existen y que la luz del sol puede iluminar con nuestra energía sola una pequeña porción de nuestro entorno o la oscuridad puede dejar en penumbras todo lo que, quizás, hasta ahora, lo teníamos claro.

"Uno mismo se encuentra en un estado extático hasta el punto de que siente que casi no existe. He experimentando esto una y otra vez. Mi mano parece desprovista de mi propio ser, y yo no tengo nada que ver con lo que está sucediendo. Simplemente me quedo sentado, en un estado de admiración y desconcierto. Y todo fluye por sí mismo". -Daniel Goleman-

Déjese fluir, no se asuste, es como la extracción de sangre; pero trate de no mirar para otro lado, disfrútelo. A veces se requiere de una cuota de dolor para seguir adelante y poder vivir el porvenir con mayor satisfacción, coraje y valentía.

Cierre los ojos luego de leer algunas frases y déjese llevar por su propia energía inspiradora. Luego, comience el viaje.

Trastornos mentales
"Más allá de los umbrales de la mente humana"

A modo de introducción

Todos hemos visitado diferentes lugares, algunos nos han resultado más placenteros o divertidos; así otros han sido aburridos o, por el contrario un tanto difíciles. Pero sin lugar a dudas, el viaje más temido por todos, el que evitamos con más frecuencia y hasta con miedo, es el propio. El de nuestra mente humana. Si nos invitaran a una casa abandonada, a la cual debemos ir solos, saldríamos con mucho ímpetu y cuanto más camino recorriéramos, muchas cosas pasarían por nuestra cabeza. De pronto, desde lejos la vemos. Pensamos que es algo tenebrosa debido a sus magníficas dimensiones y su aspecto antiguo y deshabitado, nos acercaríamos con cautela. Dudaríamos, quizás por algún instante, si seguir adelante o dejarlo para otra oportunidad. Si decidiéramos seguir adelante, daríamos pasos pequeños, quizás sentiríamos que nos tiemblan las piernas al acercarnos, y en algún momento, llegaríamos a la puerta. Desearíamos estar acompañados. Pero no lo estamos. Sentimos el frío seco de estar solos y no saber cómo y de qué manera resguardar nuestras espaldas y tampoco nos animamos demasiado a mirar esa inmensa y desconocida puerta. Pensaríamos tantas cosas, que nos daríamos cuenta, con temor, que en realidad nos da curiosidad. También, podemos escapar, dar la vuelta y volver a nuestro cálido hogar. Pensamos que perderíamos una estufa, la televisión, llamaríamos a alguien, y así, estaríamos a salvo. Tendríamos muy presente que estuvimos cerca de algo que queríamos hacer, teníamos la llave, estábamos ahí, pero quizás no era el momento, o quizás sí, pero el miedo fue más fuerte que nosotros. Si alguien osado o inconsciente, para algunos, se animara a utilizar la llave y al introducirla en la cerradura, viera que no es tan fácil abrir esa puerta. Lleva años cerrada, tanto tiempo de no ser visitada por nadie. Se preguntaría ese curioso, ¿ querrá la casa que yo entre?. Seguramente no le será fácil entrar, pero menos fácil, aún, evitar no querer escapar en el instante mismo que de un vistazo hacia su interior. Si Ud. desea entrar, éste es el comienzo del camino. Un camino más allá de los umbrales de su mente.
Pero recuerde, está solo, es de noche, y seguramente, nadie lo está esperando, o quizás sí. La decisión es solo suya.