Hace unos años (2006) salió por la editorial Comares de Granada mi libro Realidad y tiempo en Zubiri. Un libro complejo que trataba sobre la articulación de la realidad y el tiempo en el pensamiento de Zubiri pero en diálogo ya con Heidegger y la filosofía en general, ya con las ciencias en especial. Se trataba  de repensar a Zubiri y su concepción de la realidad de 'otro' modo; de un modo que el tiempo tiene mucho que decir y no es el 'pariente pobre' de la filosofía zubiriana. En esto le dábamos cierta razón a Heidegger y su célebre Sein und Zeit de 1927.

Ahora bien, pasado un tiempo me he visto en la necesidad de mostrar el supuesto mismo de este libro; esto es, pensar la articulación que posibilita la reflexión del tiempo, o sea, pensar el ser. Así este libro es, como se dice ahora en ámbitos estéticos, una 'precuela' del anterior. Este libro 'posterior' al primero es 'anterior', pues nos señala la articulación del tiempo con la realidad desde su fundamentación, es decir, desde el ser. Y en ello nuevamente es Heidegger con el que dialogamos durante todo el libro, pues vemos en él (y en particular su pensar en torno al Ereignis desde 1936 en adelante), la impronta fundamental que atraviesa a Zubiri en lo más profundo de su filosofía de la formalidad de realidad.