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Orfeo en el infierno del siglo XXI

Autor Jozef Wittlin / Amelia Serraller Calvo

Editorial LIBROS DE TRAPISONDA

Orfeo en el infierno del siglo XXI
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  • Editorial LIBROS DE TRAPISONDA
  • ISBN13 9788461765393
  • ISBN10 8461765397
  • Tipo LIBRO
  • Colección IRUTA DE BOJ #
  • Año de Edición 2000
  • Idioma Castellano
  • Encuadernación Rústica con solapas

Orfeo en el infierno del siglo XXI

Autor Jozef Wittlin / Amelia Serraller Calvo

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Detalles del libro

Orfeo en el infierno del siglo XX, publicado en 1963, es un vasto ciclo memorialista y ensayístico, del que en este volumen recogemos sus mejores textos. Reflexiones lúcidas sobre la guerra y la literatura pacifista, sobre el exilio, sobre la propia creación literaria y el papel del poeta tras el espanto de la guerra y los campos de exterminio, vívidas semblanzas literarias como la de su amigo Joseph Roth, recuerdos de la Viena de sus años estudiantiles llenos de nostalgia mitteleuropea, la Varsovia de antes de la guerra, del París literario, de sus puentes, sus buquinistas y sus librerías míticas como las de Adrienne Monnier y Sylvia Beach, meditaciones amenas e irónicas de espectador en el sentido orteguiano, sobre el paisaje y el paisanaje, evocadoras de un mundo de ayer, trastocado en sus vidas y en sus lindes, que un Orfeo desconcertado no logrará apaciguar con su lira.

«El mítico Orfeo amansaba con su canto a las fieras salvajes hasta que se posaban a sus pies y escuchaban dóciles sus canciones. El Orfeo actual ya no tiene este poder. Ni siquiera es capaz de domar la bestia encerrada en la jaula del corazón humano. Ninguna canción detendría el estallido de ese volcán que es el odio humano, ni le cerraría a los cañones sus bocas, ni detendría a los tanques ni tampoco impediría que las bombas calcinen una ciudad. Ninguna canción desmantelaría las cámaras de gas, ni barrería de la superficie de la tierra Dachau y Bergen-Belsen, Auschwitz, Majdanek y Treblinka».


Józef Wittlin nació en 1896 en Dmytrów, Galitzia, en los confines del Imperio. Pronto la familia se trasladó a Lvov, entonces Lemberg, paradigma de la broma cartográfica de una Europa oriental de líneas oscilantes. Educado en el seno de una familia de origen judío asimilada y de lengua polaca, apenas aprendió unas pocas palabras en yiddish que utilizaba para hablar con sus gatos. Se matricula en la universidad de Viena, donde frecuenta las tertulias como la de Karl Kraus y los cafés literarios donde conoce a los escritores Rilke y a un joven Roth a quienes traducirá posteriormente al polaco. Al margen de sus ensayos, su gran obra será la novela La sal de la Tierra primer tomo y único de una proyectada y accidentada trilogía —los manuscritos, guardados en una maleta, fueron arrojados al mar por un soldado francés al considerarla exceso de equipaje—. Esta obra, como bien decía su amigo y valedor Herman Kesten en una carta de recomendación dirigida a las autoridades norteamericanas, le hizo merecedor de una candidatura al Nobel en el año 39. Su personaje, Piotr Niewiadomski, empleado de ferrocarril, analfabeto y bienintencionado súbdito imperial —«Todo en este mundo es del emperador. O de Dios»— que se deja arrastrar dócilmente hacia una guerra que apenas entiende. La obra fue editada por Mario Muchnik en una magnífica traducción de Elzbieta Bortkiewicz y Juan Carlos Vidal. Wittlin murió en el invierno de 1976 en Nueva York, muy lejos de su añorado Lwow.

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