El cuento, según Julio Cortázar, es «[…] una síntesis viviente a la vez que una vida sintetizada, algo así como un temblor de agua dentro de un jarrón de cristal, una fugacidad en una permanencia […]».
Pese a su brevedad, el cuento es uno de los géneros literarios más complicados, mucho más que la novela o el ensayo. En pocas palabras, abordando temas extraordinarios o incluso simples y ordinarios, el escritor debe seducir al lector desde el inicio. No hay espacio para florituras ni para exceso de explicaciones, todo debe tener una medida justa. Por eso, estos doce cuentos de Belén Rojas debemos leerlos como la propia autora dice: «igual que hacen los mineros allá en las tierras selváticas de mi patria natal: pasándolos por el tamiz para descubrir en ellos los pequeños tesoros ocultos en su interior».
En este libro que tienes en tus manos, lector, encontrarás cuentos cotidianos y, sin embargo, de una gran profundidad. Cuentos que destilan ternura y lirismo. Cuentos que alegran el corazón y nos conmueven; que nos enseñan a ver la vida como un hermoso Quilt confeccionado con menudos pero significativos acontecimientos. Esa sencillez es lo que les otorga su brillo y su valor.