Heredero de la más antigua línea interpretativa de la obra cumbre de Cervantes, la que identifica la figura de Don Quijote con Ignacio de Loyola, este libro fija definitivamente el incuestionable parentesco entre el personaje cervantino y el fundador de la Compañía de Jesús. Al sacar a la luz la desconocida y silenciada historia del secuestro del Relato del peregrino y su suplantación por La Vida de Ribadeneira, Federico Ortés, demostrando brillantemente, gracias a la informática, la exhaustiva relación entre esas fuentes y la novela, nos deslumbra con un valeroso e ignorado Cervantes que, en arriesgado ejercicio de compromiso intelectual, asume la denuncia de unos hechos de trascendental importancia para la historia de España. Un trabajo imprescindible para entender el objetivo primordial del Quijote, pues no solo explica (ípor primera vez en la historia del cervantismo y partiendo de las mismas fuentes documentadas!) el contenido simbólico de cada uno de los capítulos, sino todos los históricamente mal considerados errores, lapsus y olvidos de la novela, convertidos, gracias al virtuosismo de Cervantes, en insólitos recursos literarios que obligarán a corregir criterios aceptados como inamovibles hasta ahora.