La existencia de una desigualdad socio-econ¢mica entre un trabajadoraut¢nomo econ¢micamente dependiente (TAED) y su cliente principal,genera una conciencia social proyectada sobre los poderes p£blicos que persigue proteger al TAED a trav?s de una norma, el Estatuto delTrabajo Aut¢nomo (LETA), que salvaguarda a este colectivo desde elpunto de vista sustantivo y procesal. En este sentido, la protecci¢nprocesal tiene lugar con una remisi¢n a las normas del proceso laboral (LJS), una soluci¢n no balad¡, pues de todos es sabido que el proceso laboral nace de una desigualdad socio-econ¢mica entre el trabajador y el empresario.
Mientras que la dimensi¢n sustantiva ha sidoabordada por la doctrina iuslaboralista, la dimensi¢n procesalpermanece a£n en el ba£l de los recuerdos, amparada en el hecho deque, a d¡a de hoy, son residuales los litigios laborales con estecentro de imputaci¢n objetiva. Sin embargo, en el futuro, todo pareceapuntar, se incrementar n exponencialmente y los operadores jur¡dicosnecesitar n contar con un instrumento para encauzar la problem ticaque plantea su tratamiento procesal interno e internacional y ellopara evitar hacer o¡dos sordos ante la internacionalizaci¢nsocioecon¢mica, la expansi¢n transnacional de las relaciones laborales y la expansi¢n mundial del sistema de producci¢n capitalista. Nuevostiempos, nuevos derechos y nuevas pretensiones procesales?.